En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor. Una olla de algo más vaca que carnero, salpicón las más noches, duelos y quebrantos los sábados, lentejas los viernes, algún palomino de añadidura los domingos, consumían tres partes de la hacienda.
Elija Lenteja de Tierra de Campos los viernes de Diciembre, le obsequiaremos con un saquito de Lentejas de Tierra de Campos y participará en el sorteo de una cena para dos personas en cada uno de los restaurantes donde las consuma.